Carlitos El Dulcero

LETRA

Carlitos El Dulcero

-Hey muchacho, dulcero!!!
-Dígame señor
-Cuál es tu nombre?

Mi nombre es Carlitos y vendo dulce,
para sobrevivir aunque mi vida no ha sido del nada dulce ha sido muy amarga
y el destino me cobra a la corta lo que a los otros quizás a la larga,
soy muy joven aunque la verdad
he sentido la vejez del sufrimiento a mi corta edad pero usted entenderá
que la vida es dura y se suda cuando la cruda realidad grita NECESIDAD.
Sería bueno trabajar para progresar, mejorar y cambiar de mi status social
pero lo que gano es para alimentar a mi familia que en casa siempre me han de esperar con él. Estomago partido, las tripas haciendo ruido
porque esta es la hora que todavía no han comido
esta es la hora que solo he vendido 2 dulces y tengo hambre
¿A dónde se fue mi suerte? A donde?
Si las gentes supieran con el cariño que lo hago
para ganarme unos míseros centavos
para sustentar esta vida inerte y evadir la fragancia rancia que me acosa con la muerte.
Hay gentes que me ignoran, por mis aramos me catalogan
como delincuente o que consumo droga
no saben la razón de esta vida recia
solo se fijan en mi sudor y esta cara sucia,
muchos se burlan otros intentan humillarme
pero no entienden que yo quisiera superarme
que yo no elegí esta cadena para condenarme
y la sociedad me ve como un problema debo resignarme.
A ser marginado a caminar y no ser notado
por el pasillo de los olvidados solo estoy vivo por 2 motivos
por los cuales respiro por los cuales los dulces van conmigo.

-Woww que penosa tu situación, no está estudiando?
Se ve que eres un muchacho trabajador y con deseo de superarse y tus padres no te dan ayudas?

Bueno, cuando yo tenía 10 años mi padre nos abandono,
no se imagina cuanto nos dolió
mi hermano pequeño no lo recuerda
porque el tenia 2 años apenas cuando papi nos dejo,
mi madre sufrió tanto que cayó en cama,
tuve que soltar los estudios y coger la limpia bota para emprender el camino
y dejar los juguetes para convertirme en el juguete del destino,
yo mantengo a mi madre y a mi hermano
con los dulces la vida me gano aunque pierdo la mía pero no hay un día
en que las lagrimas no visiten la puerta de mis ojos por eso esta rojo algunos días.
No he fácil la vida que llevo pero mi conciencia es limpia,
aunque yo este sucio como un pordiosero
no me atrevo a atracar, a robar ni matar prefiero sudar y honradamente trabajar yo quiero.
Mi madre me ayudaba hace un tiempo pero se sentía cansada y en casa tuvo que quedarse
y todo se complico cuando el doctor la reviso y le diagnostico un incurable cáncer,
hay medicina que no puedo comprar, hay tratamiento que no puedo pagar
son caros en exceso pero algo que no tiene precio
son los abrazos de mi madre, su sonrisa y sus tiernos besos.
Como quisiera que mi situación sea diferente
un buen trabajo para que no me discrimine las gentes
pero no entiende algo ilógico como la suciesa se refleja en la limpieza del político.
Tome no pague lo que cuesta
es que quiero regalarle un dulce por escucha lo que a mí me afecta
pero yo solo quería que sepa
que mi realidad no se palpar desde el asiento de su jeepeta.