La noche

ANÁLISIS | SIGNIFICADO

En el inicio de la noche, se perciben los primeros rastros de tu fragancia, despertando en mí un deseo irrefrenable de encontrarte, una nostalgia imposible de borrar incluso con el humo que inhalo. No te imploro comprensión, simplemente anhelo que me escuches atentamente mientras enfrento emociones ambiguas que nos conectan en escasas ocasiones.

Poco a poco hemos ido descubriéndonos mutuamente, sin cesar de sorprendernos. Anhelo con fervor robar un beso tuyo, explorar esa sensación desconocida. Nuestros caminos se han entrelazado y ya no logras salir de mi pensamiento, anhelando ese beso a pesar de nuestras notables diferencias.

Eres una dama de apariencia inocente pero con un toque de peligro, que se deja llevar por la curiosidad y las tentaciones con su amiga. Rechaza las espinas y prefiere el cuidado y la complicidad. Vamos descubriéndonos y mi intención se transforma con el transcurrir del tiempo, me desconcierta su mirada penetrante, desorientando mis sentidos.

Cada noche se inicia con tus aromas, aumentando la pulsión de volver a verte, ese anhelo persistente que no se desvanece incluso ante el humo. No busco que me comprendas, simplemente anhelo que me escuches con atención. Las emociones confusas me inquietan, resaltando los pocos lazos que nos unen.

Nuestro proceso de descubrimiento no cesa, sorprendiéndonos continuamente. Sueño con ese beso que quiero robar, explorando lo desconocido. Tu presencia no desaparece de mi mente, anhelando ese beso a pesar de las claras diferencias que nos separan.

Tu mirada roba mi aliento, intento ocultar la emoción que me embarga. No te has percatado aún de cómo tu mirada apaga las luces a mi alrededor. No necesito a nadie más, he dejado de buscar en otra ciudad. Tu percepción no alcanza a comprender cómo tu mirada se convierte en mi perdición.

Con cada inicio de la noche, se despiertan las emociones y los anhelos que nos unen, en un ciclo continuo de descubrimiento y deseo.