ANÁLISIS | SIGNIFICADO
En esta emotiva canción de Andrés Cepeda en colaboración con Morat, se narran los sentimientos encontrados de dos personas que se ven envueltas en una relación intensa pero problemática. Las letras sugieren una lucha interna entre el deseo de retener a la otra persona y la necesidad de dejarla libre para su propio bienestar.
Andrés Cepeda expresa su reconocimiento de haber sido cautivado por alguien que le robó la mirada sin permiso, pero también reconoce que el destino parece estar en contra de retener a esa persona. En medio de ese conflicto, se debate entre el deseo de forzarla a quedarse y la aceptación de que es mejor dejarla ir.
La letra transmite la idea de que a veces, aunque queramos retener a alguien a nuestro lado, es necesario dejarlo ir para su propio bienestar y el nuestro. A través de metáforas y emotivas palabras, la canción refleja el dolor y la resignación de tener que soltar a alguien amado, a pesar de la dificultad que eso implica.
En última instancia, la canción resuena con la idea de dejar ir a la persona amada, aunque duela, y aceptar las circunstancias tal como son. Es un llamado a la honestidad emocional y a la valentía de soltar lo que ya no nos pertenece, incluso si eso significa enfrentar el dolor y la incertidumbre.