ANÁLISIS | SIGNIFICADO

Cuando llega la noche y sientes algo especial, el latido acelerado de tu corazón te recuerda que esa persona en particular te ha provocado una locura irresistible. La ansiedad por su llegada se palpa en el aire, anhelando tan solo estar junto a ella.

El saludo es cálido, el reencuentro es un placer, y la complicidad se siente en cada mirada compartida. La conversación es efímera, la ropa se convierte en testigo mudo de la pasión desatada. La lujuria y el deseo navegan sin freno, solo existe un camino: la pasión.

En medio de este torbellino de emociones, el estribillo resuena como un mantra seductor: 'Marca mi número, es el seis seis seis'. El número de la bestia se convierte en un llamado a entregarse al deseo desenfrenado, a la conexión intensa que solo ellos dos comparten.

Entre risas, nicotina y tragos, encuentran su vitamina ideal: el amor. Sin importar la hora ni el lugar, su amor es original y complaciente, dispuesto a satisfacer cualquier deseo que sus cuerpos pidan.

Y una vez más, el estribillo los invita a rendirse a la tentación: 'Marca mi número, es el seis seis seis'. En ese número, en esa conexión, encuentran el paraíso de placer y deseo que solo ellos dos pueden habitar.

Letra de 666
Vídeo de 666