ANÁLISIS | SIGNIFICADO
En esta cautivadora canción de Charly García, se nos invita a reflexionar sobre la belleza y la dualidad de la vida. Nos habla de la constante renovación, simbolizada en el nacimiento de una flor y en la salida diaria del sol. También nos recuerda la presencia de una voz interna que nos invita a disfrutar de los pequeños placeres, como el canto de las chicharras.
Sin embargo, también se menciona la existencia de un obstáculo interno que puede limitar nuestro potencial, alejándonos de lo mejor que tenemos para ofrecer. A pesar de este desafío, la canción nos anima a mantener viva la llama de la libertad en nuestro corazón, recordándonos que, aunque podamos ser corrompidos o olvidarla, siempre estará presente.
Charly García nos transporta a un pasado de luchas y sueños, con referencias a los marginados, los rebeldes y los encarcelados. Pero a través de su música, nos invita a cantar nuevamente esta canción que trasciende el tiempo, recordándonos la importancia de mantener viva la esperanza y la resistencia. Una oda a la necesidad de perseverar y seguir cantando, una vez más.
