ANÁLISIS | SIGNIFICADO
Hace cuatrocientos mil años, seres del espacio exterior nos otorgaron vida en este planeta, pero ahora sentimos que estamos descuidando todo lo que nos han dado. Observamos el humo que nos rodea y nos sentimos desconectados de la humanidad, como si los glaciares fueran nuestros ojos y las montañas nuestra cabeza, con el corazón como un océano que nos hace sentir solos en medio de la devastación.
La canción reflexiona sobre el odio que también habita en nosotros y la necesidad de expulsarlo. El mundo se está reduciendo y nos damos cuenta de que nadie puede reconstruirlo, estamos en medio de una evolución deformada. Pero en medio de la incertidumbre, recordamos a nuestro niño interior y le decimos que no tema a la vida, que un día reinará y el miedo desaparecerá.
A pesar de las dificultades, hay una luz que brilla debajo de nosotros, una verdad que todos compartimos. Como guerreros, debemos luchar y descubrir el amor que nos rodea. Y en un sueño, vemos a nuestro planeta sobrevivir, guiado por estrellas en constante crecimiento. Todos los países, en conjunto, se están reconstruyendo y evolucionando, nutriéndose de una nueva esperanza que crece en nuestro interior.
Así, con determinación, abrimos los ojos y abandonamos el flujo destructivo, reconociendo que una nueva esperanza está emergiendo en nuestro interior, con la certeza de que veremos a nuestros hijos crecer en un mundo mejor.