ANÁLISIS | SIGNIFICADO
En una tierra lejana, donde el sol brilla con fuerza y la sierra resuena con historias, se cuenta la leyenda de un coyote, un bandido nacido en aquellas tierras áridas. Desde pequeño, este coyote y yo íbamos juntos a la escuela, compartiendo lecciones y sueños. A pesar de las desilusiones, él nunca lloraba, siempre armado con su guitarra y canciones de pelea.
Una noche de mayo, mientras yo llegaba a caballo a encontrarme con mi amada María Elena, el coyote también se presentó, abrazando a la misma mujer. Sin temor, le informé que ella ya tenía mi nombre, pues el cura de la ermita sagrada nos había casado en el monte. El coyote, furioso, intentó atacar, pero yo le detuve con valentía.
Coyote altivo, que no supiste respetar amores y traicionaste la confianza, tu destino fue sellado por tus propias acciones. En un duelo de lealtades, al final te mataron tus traiciones, dejando tu historia grabada en las montañas como advertencia de los peligros de la deslealtad.