ANÁLISIS | SIGNIFICADO
Una tarde de enero, el cielo testigo de un encuentro conmovedor. Sus ojos reflejaban una palidez que contrastaba con la esperanza en su mirada. En su lecho, entre suspiros, pronunció las palabras que temía escuchar: 'Me muero'.
El peso en el pecho, la angustia creciendo en el alma. Con amor y desesperación, se aferró a la promesa de seguir amando. Pero él, con resignación, reveló que el cielo lo llamaba con fuerza, aceptando su destino con una sonrisa entre lágrimas.
En ese momento de despedida, recordó el amor compartido, agradeció por el afecto recibido. La vida se desvanecía como el sol al caer, dejando un vacío en el corazón que lloraba su partida. En un abrazo final, selló sus palabras de amor eterno: 'Te espero en la otra vida'.
Los susurros del viento llevaban consigo la promesa de un reencuentro. Entre lágrimas y sonrisas, el amor perduraba más allá de la despedida. Y en medio del dolor, en sus labios la certeza de que él fue, en esta vida, el amor más sentido y anhelado.
