Patricio Rey y Sus Redonditos de Ricota

La dicha no es una cosa alegre

Patricio Rey y Sus Redonditos de Ricota

ANÁLISIS | SIGNIFICADO

En medio de una rumbita que se arma, una fea carcajada resuena en el ambiente. Te das cuenta de que no eres incombustible, ¿cómo logras soportar ese infierno en el que te encuentras? Sueñas con la hoguera, pero en esa hoguera siempre eres la leña que arde. ¿Hasta cuándo seguirás esclavizado de esta manera, refugiado en tu soledad?

Dejas que el tiempo pase, tomando de más y tolerando todo lo que viene. Heriste tu corazón porque ella te abandonó, y ahora te encuentras mordiendo el aire, solo y sin dolor. ¿Hasta cuándo soportarás estar atrapado así, refugiado en tu soledad, envuelto en la tortura de la televisión?

La mujer que amas, esa delicada flor judoka, se disfraza de maga zulú y mezcla tus venenos, mostrándose ingeniosa y siempre fiel en su odio. Mientras la vida sigue su curso sin que te des cuenta, ahí permaneces con tu semblante perdido. Tu ángel guardián es, de todos, el más ingenuo. ¿Cuánto más te mantendrás esclavizado, refugiado en tu soledad, sumido hasta el fondo en esa situación?

Tienes todas las cartas para sellar tus labios, para guardar en silencio todo lo que callas. ¿Hasta cuándo seguirás así, envuelto en tu propia tortura, siempre igual?

Letra de La dicha no es una cosa alegre
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