ANÁLISIS | SIGNIFICADO
Déjame tomar tu mano, siento una emocionante vibración en mi ser, como gelatina temblorosa. La tristeza se cierne, se cuela por las ventanas y el suelo, mientras observamos los fuegos en el cielo, tan perfectos como los gatos. Nos encontramos juntos una vez más, inmersos en un juego aparentemente tonto.
Pero no me importa si a ti no te importa, no experimento si tú no lo haces, no deseo si tú no quieres, y no revelaré nada si no es revelado primero por ti.
Quizás te sientas cansada ahora, pero aguarda hasta las tres de la madrugada... riendo bajo las luces navideñas, recordando los momentos de diciembre.
Todo vuelve a repetirse, otra chica, otro nombre. Sobrevivimos sin cambiar, manteniendo la misma dinámica de un juego absurdo.
No me importa si a ti no te importa, no experimento si tú no lo haces, no deseo si tú no quieres, y no jugaré si tú no juegas primero.
Tal vez ni siquiera puedas verlo ahora, por eso me preguntas el camino. Te cuestionas si es real, tal vez no sea lluvia... Atravesamos la puerta adecuada y entramos en la habitación blanca, recordando que solía ser el polvo lo que habitaba este lugar cuando vine solo.
Pero no me importa si a ti no te importa, no experimento si tú no lo haces, no deseo si tú no quieres, y no diré nada si tú no lo expresas antes.
Doo doo doo doo, ¡vamos a la cama! Doo doo doo doo, ¡vamos a la cama!
