Ojos Rojos de Fito Paez

Ojos Rojos

Fito Paez

ANÁLISIS | SIGNIFICADO

Amanecía en Leblon, donde una menina preciosa perdida hablaba sin parar con sus ojos rojos de tanto fumar. Con rasgos que recordaban a Carmen en las pestañas, a Rita en la cintura, atrás Marilyn, con el cabello de Gilda y el dolor de Natasha. Su voz era como la de Dolores, su sonrisa como la de ella. Sin un auto, solo un planeador, vivía con pura macoña en las puertas de su corazón, riendo, mezclando pastillas y alimentando al dolor.

La casa paterna de flores finalmente se derrumbó, y todos salieron a buscarse la vida. Así empezó la vida de su madre cuando ella era solo una concha. Con un hijo hoy, otro mañana, y la habilidad de evadirse. Su boca carnosa, divina, hermosa, irresistible. Un chulazo carioca en febrero de 2001 la vio en el centro y le ofreció un camino hasta Río, un poco de coca y promesas de amor. Con solo 15 años bajo su pantalón, era pura poesía, clandestina. Durmiendo todo el día y soñando en Argentina, con sus perros, sus amigas, con Solari y su tía, todo envuelto en anfetaminas.

Todo brilla, todo se va quedando cerca del sol, cantando en el mar, llorando en esta bella marcha. Y así, mañana será otro día, Alejandra, mañana.

Letra de Ojos Rojos
Vídeo de Ojos Rojos