Biografía de Noruega
Noruega nace de algo que muchos no sabrán muy bien cómo explicarlo... lo cierto es que nació en un pequeño cuarto, un día de censo nacional, una tarde de nubes en el cielo. Ese día Gustavo Almirón (Tavo), Matias Coll (Matt) y Nahuel Alvarez (ENA) habrían decidido concretar lo que ya hacía mucho tiempo se venía gestando: “Una tarde de Rock”.
Las influencias de cada uno de aquellos individuos era tan diversa que solo la música iría a ser la única vía capaz de expresar esa conjunción de mundos musicales, plasmados en una batería, una guitarra, un bajo y sus gargantas.
Los sonidos se fueron encontrando. Como cualquier persona que se conoce, ellos se estudiaban, se medían, intentaban conectar. La música comenzaba a tomar color, volumen, textura y sabor. Las vibraciones se sintieron en las entrañas de aquellos que estuvieron allí para presenciarlo.
EL GUERRERO DEL GARAGE QUE CORTABA LAS CUERDAS CON SU ESPADA
“Matt”, un muchacho de influencias indie, rock británico, pop y sonidos electrónicos fue capaz de colocar las primeras palabras a los sonidos que surgían, hasta convertirlos en letra. Quien se hizo cargo de la vocalización así como de la guitarra tanto rítmica como primera guitarra cortando innumerables veces las cuerdas dejándose llevar por los sonidos, como un guerrero con una espada prendida fuego que va al frente de una guerra, disfrutó durante un largo período de las bondades de los ensayos, presentaciones en lugares impensados como radios, o bares casi sin preparación para albergar lo que en aquel momento eran tres muchachos en búsqueda de una música que los caracterizara.
EL EXCALIBUR DEL VALLE DE LA LUNA
“Tavo”, un enamorado de la vida, un romántico de metal, casi tan firme como el paso de una mula, se hizo de las gruesas cuerdas y aportó cuanta escala rockera se le cruzaba por la cabeza. Saltarín y desinhibido en los toque, supo interactuar y contagiar al publico a sentir lo que estaba transmitiendo. Un perito, un helado de limón, un bombón del día de los enamorados relleno de frambuesa pero recubierto de metal aportó innumerables riffs a las canciones, influencias de metal, hard rock y punk, gozó de los beneficios del perfil bajo de los bajistas en una banda de Rock. Con el mismo grado de fortaleza y tenacidad como el del rey Arturo al sacar la espada en la piedra, Tavo fue el cómplice perfecto de Noruega para contagiar a la gente e incitarla a conectarse, a bailar y a saltar.
EL PIBE QUE NUNCA… NUNCA SE QUEDABA QUIETO
“ENA”, un personaje enroscado en su forma de ser como en su manera de tocar la batería. Jugando con tiempos y contratiempos, sin hacer muchos compases iguales, aportó lo que aporta la batería en sí… ritmo, tempo, armonía y desarmonía. Transportando influencias de rock alternativo, punk, hard rock, metal, supo aprovechar las bondades de la retaguardia de los escenarios y enviar siempre hacia el frente los golpes y sonidos de los parches y platillos, marcando el tiempo, el destiempo, y por sobre todo explosión, mucha explosión. Participe en muchas de las creaciones de la banda y unos cuantos coros y algunas vocalizaciones ENA se sentó en la banqueta de la batería para no volver a levantarse de ese trono. Poseído por la música, la improvisación y los acordes del Rock encontró la fórmula perfecta para hacer latir el musculo vital de Noruega, como el corazón hiperquinético del universo musical que nunca, nunca deja de latir. hoy en dia, es el unico integrante que se mantiene en la banda desde su comienzo.
LA LLEGADA DEL RONIN
Luego de vagar por el mundo, a veces con rumbo, otras no tanto, se inmiscuye en escena un sujeto muy particular que será recordado por su capacidad de mover seis cuerdas para generar un efecto de agite en personas que fueran capaces de escucharlo. Es que, casi como un ronin sin señor feudal, sin ley, llega Gonzalo Prado… con su guitarra y sus canciones al hombro Noruega se transforma para incluirla en su código musical.Brotado de poesía, aporta significantes a las canciones que rápidamente se amoldan y adoptan mensajes característicos. “Gonza” como comúnmente lo llaman muchos, actualmente se hace cargo de la vocalización y guitarra rítmica de Noruega
EL MUCHACHO DEL CORO
Andados ya unos cuantos días de Noruega sonando en los ensayos, durante un corto tiempo pero no por corto inexistente, coquetea Bruno Bitar. Un personaje escurridizo para el ojo humano que procuró hacerse cargo de la voz principal de la formación. Proveniente de un coro universitario que lo bautizó en sus pasos sobre escenarios y ensayos, llega el prolijo joven del las voces en conjunto. Lo hizo durante algunos encuentros, aportó coros y unos cuantos arreglos vocales a las canciones, para luego seguir su camino por otros pasadizos de la vida.
A CHILD FROM CARRODILLA
Codiciado por muchas bandas por su irrefutable y versátil oído musical, con un instrumento marcado por los golpes de la música, se materializa Renzo Di Marco, más conocido como “Renzón”, un muchacho bilingüe de habla inglo-hispana capaz de de vivir en Carrodilla y surcar las calles con recorridos de transporte público acompañado exclusivamente de uno auriculares que transmitan música de fondo. Esta promesa musical, diamante en bruto, fue captado por Noruega en el momento exacto. Casi tan exacto como el momento en que Barcelona se llevó a Messi para proporcionarle las condiciones idóneas para desarrollarse. Renzón se hizo cargo de las cuerdas más gruesas y de los sonidos más sucios y oscuros de Noruega, aportando ideas alternativas, disonantes, y revolucionarias para el estilo. Hoy en día nadie va a discutir que este chico no solo se adueñó del bajo y los sonidos indicados, sino que también le aportó una imagen diferente y complementaria. Como la figurita difícil del álbum, Renzón es Noruega.
COMO CAIDO DEL ROJO VIAJE DE UN TAL QUENTIN
Descubierto infraganti y solitario en medio de la muchedumbre con una guitarra, haciendo sonar los acordes y arreglos de “Asilos Magdalena” de The Mars Volta, Fernando Ruiz no pudo encontrar otro destino que el pasaje extenso y firme por la primera guitarra de Noruega, en el momento en que lo pedía a gritos. Clásico como psicodélico, el mejor conocido como “Ferra”, llegó para tirar magia como se diría en el lunfardo. Manejando un timing extraordinario para moverse libremente por las melodías, aplicando escalas de todo tipo y color, velocidad, armonía, las cuerdas han dicho. Se hizo fuerte, forjó su carácter y disipó todo tipo de dudas sobre quien realmente es: un pibe de R O C K.
EL VIOLERO QUE JAMÁS TUVO VERGÜENZA
Contactado casi de rebote, por fortunas de la vida y las bondades de la era del internet, como quien bucea la web para encontrar algo que necesita, aparece Gino Sgrignieri, conocido como “Ginóu”, conectando básicamente dos influencias tan claras como una imagen: Led Zeppelin y Pink Floyd. Un sujeto caracterizado justamente por su carecimiento de reparo. Siempre al frente, apareció con su clásica guitarra, amplificador y pedal, a mostrar quien era y qué venia a aportar. Noruega no tardo en dar cuenta de que esos sonidos de primera guitarra no solo no diferían de lo que estaban acostumbrados, sino que mostro un nivel motivacional pocas veces visto. Encajó tan rápido como esa pieza del rompecabezas que definitivamente completa la imagen total, y se puso la camiseta, que ningún miedo le dió, de la guitarra que Noruega buscó… y encontró.
NORUEGA HOY
Como todo proceso tiene su tiempo, el proceso de Noruega tuvo lugar. Nació en aquellas cuatro paredes, supo alzar a distintas personas a las cuales le está completa y profundamente agradecida, buscó los sonidos que mejor le sentían a sus instrumentos y gargantas, logró definir una imagen a mostrar y finalmente hoy está dispuesta a continuar existiendo, porque es parte de la música, es parte del arte, parte de nuestras vidas y aportando un humilde arreglo musical, llega a los oídos de todos aquellos que nos quieran acompañar en este tan hermoso camino del Rock, de la música.
."ENA" NORUEGA.
Miembros Actuales:
Ena: Bateria, voz.
Gonza Prado: Voz, guitarra.
Gino Sgrignieri: Guitarra, coros.
Bruno Serio: Bajo
Fuente: Daniescence a través de Musica.com