ANÁLISIS | SIGNIFICADO
Bajo la lluvia que cae con más fuerza que ayer, me encuentro envuelto en lodo, pero persistiré. A pesar de que la tormenta me impide ver claramente y el viento sopla con fuerza, sé que estás a mi lado. Soy testigo de tu luz incluso en los momentos de mayor oscuridad.
Tú, Jesús, eres mi brújula si me pierdo en medio del mar, donde la oscuridad intenta invadirlo todo. Con tu luz como guía, puedo ver el camino que debo recorrer. Me comparo con un niño distraído por juegos irresistibles, que cree que puede sortear cualquier peligro sin caer. Pero sé que debo confiar en ti, que todo lo sabes.
Ayúdame, guíame, carga con mis pesares. Mi boca callada espera tus palabras. Deseo ser fiel, no fallarte. Sin tu ayuda, todo sale mal. Permíteme permanecer en tu amparo, en tu hospital espiritual donde encuentro el alivio que mi alma ansía.
No me des de alta, pues tu oxígeno es mi sustento. Sé el capitán de mi barca, quien allana el camino difícil. Contigo a mi lado, seguiré adelante, atravesando la tormenta, sorteando el lodo que intenta detenerme.
Jesús, mi refugio en medio de la tempestad, mi luz en la oscuridad del sendero. Confiado en tu presencia, seguiré adelante, testigo de tu guía. ¡Jesús, mi eterna esperanza!