ANÁLISIS | SIGNIFICADO
En una fresca mañana, una gota de rocío cayó del cielo y limpió la carita de un amor especial. Aunque aún no salía el sol, el frío heló las manos y mejillas de ese ser amado. La esperanza brillaba en el cielo, creyendo que las estrellas vendrían a buscarla para jugar en su rostro hermoso.
Con intensidad y calor, el amante acudió al llamado de su ser querido, encendiendo su corazón con un beso apasionado. En medio del temblor y la emoción, ella expresó que ese acto fue lo que faltaba para que el sol finalmente saliera. La gota de rocío, símbolo de renovación y pureza, seguía cayendo, asegurando que ese amor siempre perdurara.
Así, en cada caída de la gota de rocío, el deseo de ser amado eternamente se hacía presente, manteniendo viva la llama de la pasión y el compromiso. Con ternura y esperanza, la canción nos invita a creer en la fuerza del amor y en la constancia de los sentimientos más genuinos. Las palabras de Silvio Rodríguez nos transportan a un lugar de intimidad y conexión, donde cada gota de rocío es un recordatorio del poder del amor verdadero.
