Adivina, adivinanza

Adivina, adivinanza

Joaquín Sabina

ANÁLISIS | SIGNIFICADO

En la canción 'Adivina, adivinanza' de Joaquín Sabina, nos sumergimos en un surrealista entierro donde personajes históricos, ficticios y reales se reúnen para despedir a un misterioso difunto. Con un tono irónico y festivo, la letra nos transporta a un escenario donde Napoleón, Torquemada, el Cid Campeador, Santa Teresa, el Ku Klux Klan y muchos más se unen en una procesión única y extravagante.

Sabina juega con la incorrección y la transgresión al incluir a figuras polémicas y variopintas en este evento especial, donde hay espacio para la crítica social y política, así como para la celebración desenfrenada. El contraste entre la solemnidad de un entierro tradicional y la excentricidad de este funeral peculiar crea un ambiente absurdo y cargado de humor negro.

A través de versos llenos de referencias históricas y culturales, el cantautor español nos invita a reflexionar sobre la muerte, la memoria y la ironía de la vida misma. Con un ritmo pegajoso y una melodía festiva, 'Adivina, adivinanza' nos lleva en un viaje surrealista y satírico que nos invita a cuestionar nuestros propios prejuicios y convenciones sociales. Una canción que, más allá de sus extravagancias, nos invita a disfrutar de la diversidad y complejidad del mundo que habitamos. ¡Colorín colorado, esta canción ha terminado!

Letra de Adivina, adivinanza
Vídeo de Adivina, adivinanza