ANÁLISIS | SIGNIFICADO
En medio de la marea, surge la falta de sed, cuando las heridas ya son suficientes y resulta complicado enfrentarnos cara a cara. Tras el impacto de un puño contra la pared, busco el inicio de un abrazo mientras tú recoges los fragmentos dispersos. A veces, es mejor mantener silencio, necesitamos ese espacio de tranquilidad para poder respirar.
Lloramos juntos hasta que el cielo sea verdaderamente cielo, hasta que el frío que nos hiela se transforme en un ardiente fuego, hasta que el mar llore y el beso que quedó vacío encuentre su lugar, y así todo pueda volver a comenzar de nuevo.
Los días pasan sin mirarnos realmente, conteniendo nuestro cariño para no comportarnos como niños. Prefiero sentarme al borde de tu piel, y así poder sanar las heridas de la persona a quien más amo en esta vida. La calma eventualmente llegará, apenas la tormenta se disipe nos encontraremos nuevamente.
Tomo distancia pero continúo aquí, tan lejos y tan cerca de ti, sintiendo tu presencia constante. Sé que la rabia es temporal y a pesar de que otra batalla nos espera, yo no me iré, tú no me dejarás.
Seguimos llorando juntos hasta que el cielo se convierta en cielo de verdad, hasta que el frío que nos envuelve se transforme en calor, hasta que el mar llore y el beso perdido regrese a su lugar, y así todo pueda comenzar de nuevo.
Y que todo vuelva a empezar...