Domingo rojo de Silvio Rodríguez

Domingo rojo

Silvio Rodríguez

ANÁLISIS | SIGNIFICADO

En este especial domingo, la vida rebosa de actividad. Los relojes marcan las cinco y el bullicio se despliega como un vaivén constante. Desde la madrugada, se degustan sorbos de café y se escuchan los motores cobrar vida al son de las seis. Las risas y los pañuelos ondean antes de que el sol despunte en el horizonte, mientras la voluntad se alza para hacer nacer un nuevo día.

El domingo se presenta como un excelente pretexto para entonar canciones, todo parece conspirar para saludar y acoger con calidez. Es como si la tierra fértil estuviera aguardando con ansias. En esta jornada, el sol se instala en lo más profundo, el amor actúa como una herramienta que abre ventanas y puertas a nuevas oportunidades.

La esencia del domingo parece disipar cualquier pesar, brindando la sensación eterna de primavera. La sed de lo humano no conoce límites ni fronteras en este día de resplandor. Es un remanso de paz, un momento de crecimiento y renovación donde el tiempo se viste de enamorado.

En este domingo, se augura el crecimiento de la vida en cada gesto que emane de mis manos, al acariciar el sueño que tanto anhelo. El tiempo, en su devenir, se convierte en un domingo perpetuo y entregado al amor. ¡Oh, bendito domingo, día de encuentro y de dicha!

Letra de Domingo rojo
Vídeo de Domingo rojo