ANÁLISIS | SIGNIFICADO
Hace mucho tiempo, mi hermano Kyle y yo estábamos haciendo autostop por un largo y solitario camino. De repente, apareció un demonio brillante justo en medio del camino. Nos dijo: 'Tocad la mejor canción del mundo, o me comeré vuestra alma'. Sin pensarlo dos veces, Kyle y yo nos miramos y dijimos: 'De acuerdo'. Así que tocamos lo primero que se nos vino a la cabeza, resultó ser La Mejor Canción del Mundo.
Mira en mis ojos y verás que uno más uno son dos, dos más uno son tres, era el destino. Solo una vez cada cien mil años, cuando brilla el sol y brilla la luna y la hierba crece. La bestia quedó atónita, su cola se agitó y la bestia fue vencida. Nos preguntó: '¿Sois ángeles?' y nosotros respondimos: 'No, solo somos hombres. ¡Rock!'.
Esta no es La Mejor Canción del Mundo, no, esto es solo un tributo. No pudimos recordarla, pero esta es una muestra de respeto a La Mejor Canción del Mundo. Fue la mejor canción, la más grandiosa, la más maldita de todas.
Y lo curioso es que la canción que cantamos aquella noche fatídica no se parecía en nada a esta. ¡Esto es solo un tributo! ¡Tienes que creerlo! ¡Ojalá estuvieras ahí! Es solo una cuestión de opinión, ¡vaya sorpresa encontrar que no puedes detenerla!
¡Muy bien! ¡Muy bien!