ANÁLISIS | SIGNIFICADO
A través del universo, las palabras fluyen como lluvia interminable en un papel, serpenteando y deslizándose en una danza de emociones. Las piscinas de dolor y ondas de alegría se entrelazan en la mente, evocando sensaciones profundas y delicadas al mismo tiempo.
Las imágenes de la luz quebrada bailan ante nuestros ojos, llamándonos incesantemente a un viaje a través del universo. Los pensamientos serpentean como el viento agitado, cayendo y ocultándose mientras recorren su camino en el vasto espectro del ser.
Los sonidos de la risa y las cortinas de la vida resuenan a través de nuestros oídos, incitándonos e invitándonos a explorar el amor ilimitado y eterno que brilla como soles en nuestro interior, llamándonos y encendiéndonos desde lo más profundo.
A lo largo de esta travesía, sentimos la certeza de que nada cambiará nuestro mundo, que nada alterará la esencia de lo que somos. En medio de la melodía y la poesía, nos sumergimos en la reflexión de que, en última instancia, somos parte de un universo más grande y atemporal, donde todo fluye y se entrelaza en una danza eterna.
Así, a través de esta canción, somos recordados de que el amor, la luz y la risa nos guían en nuestro viaje cósmico, marcando nuestro camino con su belleza y su verdad universal. Y en medio de todo, nos damos cuenta de que, al final, nada cambiará nuestro mundo, porque somos parte inseparable de la vastedad y la armonía del universo.
