ANÁLISIS | SIGNIFICADO
En una tarde soleada, a las seis en punto, en la autopista, se siente una sensación de libertad y velocidad. El olor a neumático quemado y el brillo del cromo parecen envolverlo todo, mientras se dirige hacia la Bahía de Cádiz y el ferry que lo llevará a casa. El mar Atlántico brilla como cristal cortado, bajo el cálido sol africano.
En medio de esta escena visual, los recuerdos se mezclan y destellan como luces intermitentes. El acelerar de un corazón y una mente que corren a toda velocidad, sintiendo que algo nuevo está por comenzar. Es como si estuviera naciendo de nuevo, con un inicio sangrante, un comienzo lleno de energía. Los motores rugen, un grito de sangre fría que pone los vellos de punta. Primero la cabeza, luego los pies, y finalmente el corazón zarpa hacia lo desconocido. Una canción que inspira sensaciones de excitación y renovación ante un comienzo emocionante.
